Relación presentada en el Congreso Clima y Viticultura, Zaragoza (E), 10-14 abril 2007, y en el 8º Simposio Internacional Innovaciones en Enología, Estocarda (A), 20-23 abril 2007. El cambio climático tiene el potencial de afectar de forma importante a prácticamente todos los tipos de agricultura. Sin embargo la historia ha demostrado que las limitadas zonas climáticas dedicadas al cultivo de la vid para vino son especialmente propensas a variaciones del clima y a cambios climáticos a largo plazo. Así como el calentamiento observado durante los últimos cincuenta años parece haber beneficiado sobre todo a la calidad del vino producido en todo el mundo, las proyecciones del futuro calentamiento a escala global, continental y regional tendrán probablemente tanto efectos benéficos como perjudiciales, bien a través de la apertura de nuevas áreas para la viticultura y de incrementos de la viabilidad, o bien a través de serios desafíos par la capacidad de cultivar uvas de forma adecuada y de producir vinos de calidad. En general, el ritmo y la magnitud del futuro cambio climático proyectado implicarán probablemente numerosos efectos potenciales para la industria del vino, que incluyen – mayor presión por lo que respecta unos suministros de agua cada ves más escasos, cambios adicionales en el comportamiento fenológico de la vid, más trastornos o alteraciones en el equilibrio compositivo y aromático de las uvas y de los vinos, cambios regionales específicos por lo que respecta las variedades cultivadas, necesariamente modificaciones en los estilos de vino regionales, y cambios espaciales en las regiones viables para el cultivo de la vid. Artículo pay-per-view disponible al precio de € 3,5 de crédito Infowine.