El proceso de tostado de las barricas y de las virutas da como resultado un diferente perfil de compuestos xilovolátiles. Esto se debe a la existencia de un gradiente térmico en las dogas de la barrica que, sin embargo no se produce en las virutas al ser mucho más pequeñas. El artículo describe la puesta a punto de un método de análisis de la fracción xilovolátil de la madera y del vino que permite la discriminación de los vinos criados en barrica de aquellos que han sido tratados con virutas. Artículo extraído del trabajo presentado durante el primer coloquio internacional sobre las moléculas activas del vino “WAC2008″, Beaune, Borgoña, Francia 27, 28 y 29 Marzo 2008