El oídio (Erysiphe necator) es una enfermedad de la vid muy extendida a nivel mundial. Los viticultores convencionales utilizan principalmente productos de síntesis y azufre en sus estrategias de defensa, mientras que los productores de uva biológica confían principalmente en el azufre, a menudo en rotación con el aceite de canola, bicarbonatos o agentes de control biológico. Hasta ahora no existía un estudio científico sobre la eficacia de estas defensas en Australia, conducido en viñedos en producción. La aplicación de leche o suero combinados con el aceite de canola, o con un producto comercial a base de bicarbonato de potasio mostraron un efecto en la reducción de la intensidad del ataque de oídio con respecto al testigo no tratado. Ocho aplicaciones de leche diluida 1:10, suero en polvo a dosis de 45 g/l o programas de rotación de aceites, bicarbonato y suero cada 10-14 días demostraron ser en la práctica equivalentes a un tratamiento con 3-5 g/l de azufre bañable Sin embargo, con variedades sensibles y modalidades de distribución no bien manejadas, el ataque de oídio alcanzó niveles preocupantes para la calidad comercial de la uva. (Se aconseja la lectura del texto completo. Título original: “An evaluation of biological and abiotic controls for grapevine powdery mildew. 2. Vineyard trials”)